Muchas veces me habéis escuchado hablar del valor de las sonrisas.
Todas las mañanas cuando saludo a tod@s y me pongo en marcha, enseguida recomiendo #Serfeliz #Abrazosgratis y sonreir ante todo.
La sonrisa genera endorfinas que mitigan el dolor y lo hacen más llevadero, los problemas se enfrentan más fácilmente si cuando pensamos en ellos o los contamos estamos sonriendo.
Tengo amigos que comparten esta filosofía de vida, uno de ellos, Ximo, el otro día me enseño este video clip, hoy lo he puesto aqui, es el mejor ejemplo. Es de Maldita Nerea: "En el mundo genial de las cosas que dices"
Espero que os haya emocionado tanto como a mí.
Me recordó cuando lo ví, el día que mi hijo pequeño, Alberto, se cayó de un árbol. El tenía 7 u 8 años. Yo estaba en el trabajo, mi hijo llegó a casa y no paraba de llorar, primero le llevaron al ambulatorio del pueblo más cercano a casa, de alli en una ambulancia al Hospital Clínico de Madrid.
Cuando por fín me avisaron al trabajo, mi hijo ya estaba en el quirófano. Pilar la mujer de su padre entre lágrimas, me recibió al llegar al hospital, había firmado la autorización para la operación con anestesia general.
Le dijeron que la vida de mi hijo estaba en juego. El niño se había destrozado el codo pero la inflamación que presentaba el brazo era muy peligrosa, estaba totalmente deformado.
Mi desesperación de no haberle visto antes de entrar en la operación es algo, que no olvidaré nunca, la pena de no haberle podido consolar y besar fue para mí insufrible.
Cuando empezó a despertar de la anestesia, ya en su habitación me miró, cuando me vió a su lado me sonrío.. creo que ha sido la sonrisa más bonita que yo le he visto nunca y mira que es risueño mi chico.
Yo también le sonreí y le abrace y asi estuve mucho rato, mientras intentaba que no se durmiese tal como me había dicho la enfermera...
Los días que estuvo ingresado, asi como su posterior recuperación muy dura y dolorosa fueron para mi obsesivos, sólo pensaba en que él no sufriera y que la movilidad del brazo la recuperara del todo.
Todo ello intenté hacerlo siempre desde el positivismo, intentando la felicidad de mi hijo y buscando la sonrisa siempre, en los momentos de dolor y en los momentos en que le notaba en la mirada un pellizco de tristeza, fueron meses duros, afortunadamente, fue en época de verano y tanto su padre y Pilar, su pareja, como Luis y yo pudimos alternarnos para poder hacerle más llevaderos los momentos tan dificiles que vivio.
Y lo conseguimos. El niño recuperó la movilidad total y no tiene secuelas apreciables, las sonrisas, los juegos, las bromas fueron terapeuticas, en caso de que algun@s de los que leeis esto tengaís algún niño enfermo,mi consejo es sacar esa fuerza que da el instinto y ayudarles a que no caigan en el desánimo. Reir tiene efecto placebo.
En el curso de cocina que hice hicimos el Coulant y mi profesor Nacho, cuando nos dió la receta nos dijo:
-"Coulant o muerte por chocolate" Tomar nota.
Su versión pasa por congelar los bizcochitos y luego ir al horno, el caso es que a mi me da una pereza enorme hacerlo así y acabe por no hacer nunca el postre en casa.
El otro día le ví a Eva Arguiñano, en el programa de "Hoy cocinas tu" esta versión, como yo digo express, sobre la marcha y me ha convencido, por eso os la dejo aquí hoy me parece bien fácil y cómoda para hacer.
Pero el nombre de Nacho del coulant no lo comparto, asi que yo lo he cambiado por algo más en la linea de lo que cuento hoy por eso, os presento
Coulant o sonrisa por el chocolate
Ingredientes para 4/5 :
-140 gr. de chocolate para cobertura (55% de cacao)
-55 gr. de mantequilla en pomada (Blandita)
-2 huevos
-20 gr. de harina. (Mas o menos es una cuchara sopera rasa le puse de repostería)
-1 cucharada sopera de azucar glass
-1 pastilla de chocolate con almendras por cada coulant
Guarnición: Helado, frutos rojos o fresas, cacao en polvo, azucar glass
Elaboración:
1.-Separamos las claras y las yemas de los huevos. Montamos las claras a punto de nieve, añadimos una puntita de sal. Reservamos
2.-Fundimos el chocolate de cobertura al baño maría o en el microondas, yo lo suelo hacer en el micro, controlo los tiempos y voy abriendo , mirando y moviendo cada 30 segundos al principio y cuando empieza a fundir cada 10. Me es más cómodo que me evita cacharreo.
3.- Cuando prácticamente está mezclamos con la mantequilla.
4.- Batimos con las varillas las yemas con el azucar, añadimos el chocolate con la mantequilla y la harina tamizada con un colador.
5.-Incorporamos las claras montadas y movemos con cuidado para que se incorporen poco a poco, con la lengua, con movimientos envolventes
4.- Ya tenemos mezclado todo ahora rellenamos los moldes, que les damos con un spray antiadherente o pincelamos con mantequilla y pelín de harina espolvoreada.
5.- Sólo rellenamos hasta la mitad, ahora ponemos una pastilla en el centro del chocolate con almendras, terminamos de rellenar hasta 3/4 de capacidad. Reservamos.
6.-Cuando vayamos a comer encendemos el horno arriba/abajo a 170 º, cuando estemos por el segundo plato o acabando eso segun veamos, metemos en el horno entre 8/10 minutos estarán hecho.
De este postre gusta mezclarlo con frio, con helado para que el chocolate caliente que sale del coulant haga el juego de sabores. Yo no tenía helado y lo serví con nata montada y frutos del bosque que tenía bien frios porque eran congelados.l
Los amantes del chocolate, serán felices en vuestra mesa.
Para adornar el plato de servicio espolvoreamos con cacao y azucar glas, el coulant y sirope de chocolate o fresa, eso vuestra imaginación.
Me has dejado con la lagrimilla en el ojo, menos mal que con el coulant lo has compensado. Me imagino la angustia que pasaste.
ResponderEliminarUn besito desde Las Palmas.
Enternecedor comentario y por supuesto !riquisimo postre! y como no tambien Guapisimo hijo ^^
ResponderEliminarBuenos dias.....ante todo darte la razón!!!! Por supuestisimo...una sonrisa de un hijo, máxime en ésas circunstancias..no tiene precio!!!!!! Tu hijo guapisimo por cierto.
ResponderEliminarY no te cuento ahora...pero tenemos mucho, mucho en común.
El postre, no tenía la receta y es uno de los que más me gustan, así que te lo copio y lo haré en tu honor.
Un abrazo y una gran sonrisa....
De verdad Helena que deberías de escribir tus memorias de verdad!, que historias tan reales y cuantas sensaciones encontradas, que increíble es la vida, en lo bueno y en lo malo. La verdad es que el susto sería mayúsculo, pero ahí hizo su trabajo la positividad que comentas, y lo fuerte y valiente de tu hijo.
ResponderEliminarEl coulant es fantástico. No hace mucho hicimos los primeros totalmente decentes, llevaremos como 3 o 4 intentos diferentes y sin publicar, no hay prisa. Sólo decirte que el que creemos que es definitivo difiere minimamente al tuyo :)
Un saludo.
Seguro que tu lo bordaras Carlos como todo lo que tu haces, gracias por tus cariñosas palabras. Besitos!!
EliminarPrecioso post Helena. Sin sonrisa no hay alegría y sin alegría no hay vida. Gracias por compartir tu historia con nosotros. Me ha encantado el coulant exprés y detrás de cada receta hay un por que de la misma. Un besete muy muy grande!
ResponderEliminarComoarto esta filosofía de vida que tienea, y que nos muestras de una forma tan tierna. A mí no me has dejadi con la lagrimilla en los ojos, directamente he tenido que limpiarla con un pañuelo, y desviar la mirada cuando ha entrado mi compañera, no fuera a pensar que me pasaba algo. Y me identifico plenamente, porque una sonrisa sana y sincera espanta todos los males. Y del postre no te digo nada, porque sabea que ya estoy deseando hacerlo.
ResponderEliminarUfffffffffffff, es increible lo fuertes que son verdad???
ResponderEliminarUn día se llevo mi hermana a mi hija, con cuatro años, a casa de su novio, tenía perros grandes, de la mismaraza que los mios, beauceron.
Mi hija , desde siempre, gran amante de todolo que se mueva, ahora estudia biologia, con eso te lo digo todo, pues se acercó a uno, no sabemos que paso, ni por que, pero la atacó, le mordio en la cara, debajo de la boca, en el brazo y casi en la ingle, la desgarró por varios sitios.
Mi hermana me llamó de camino al hospital, la llevaba envuelta en una toalla, solo se veia sangre, mi hermana por supuesto en estado de shock.
Yo no sé que tenemos las madres, pero la cogí, entré con ella, y solo le decía que me mirase a los ojos, que solo me escuchase a mí, y entré con ella en el quirofáno, como me vio el médico que me pusieron a mi tambien la bata verde y todo y estuve a sú lado, no la pòdía dormir completa.
Lo peor fué coser la cara, se le salía la anestésia.
La enfermera me decía, señora si se marea lo dice, y le dije, usted procure no marearse, yo sé lo que tengo que hacer.
Estuve, cantandole y contandele historias que le gustaban, y siempre diciendole que no dejase de mirarme.
Yo no sé ni lo que duró aquello, solo veia el cirujano, un gran profesional, y mi hija, la más fuerte del mundo, que aún así no le ha tenido miedo a ningún bicho viviente, es increible.
Todavía tiene las cicatrices en la cara y en la pierna, la del brazo era pequeña.
¿Cómo somos tan fuertes en unos momentos tan difíciles???
Unas veces me dicen que soy muy fria para ciertas cosas, en tono despectivo, pero me dá igual, son momentos que hay que estar, que se te parte el alma de no poderte cambiar por ellos y que has de seguir.
Un beso enorme mi querida amiga, siempre me haces recordar tiempos pasados , pero siempre sacas de mí la parte buena que creo que tengo.
Ese coulant lo hago por nosotras y por ellos, vaya que si lo hago.
Me has hecho llorar joia,mil besos!
EliminarYo también recuero siempre una sonrisa igual, la de mi hija, eso no se olvida jamás, te felicito por ese don que tienes de expresar los sentimientos y hacernoslo transmitir como si lo viviéramos, y muy acertado el nombre del postre, me gusta mucho más.
ResponderEliminarBesitosss
Hija mía, cómo lo cuentas todo de bien, he sufrido el dolor de tu hijo, la angustia tuya y la feliz recuperación. No todo el mundo sabe transmitir, pero tú lo haces, y de qué manera.
ResponderEliminarMira que lo he visto en blogs, y sé que en casa se morirían de gusto, pero todavía no le he metido mano, aunque tendré que hacerlo, porque promete gustarme a rabiar.
Besotes mi niña.
Una estupenda receta, y una conmovedora anécdota, un abrazo.
ResponderEliminarNo se lo que se siente en esos momentos por que no soy madre, pero intento ponerme en tu pellejo y se sufre mucho, gracias a dios todo salio bien y hoy es todoun hombreton muy guapo... el coulant es el final de una historia que acabó en sonrisa.
ResponderEliminarFantastica la receta.... bueno voy a secarme las lagrimas.
Muchos besos guapa.
..je.je que guapo tu chico!!..
ResponderEliminarlo que se sufre por los hijos..
Este postre es el preferido de mi hijo Marc...y yo siempre lo hago sobre la marcha..y ya,, si eso congelo los que sobran para otro dia..
lo que no sabia es lo de poner un trozo de chocolate con almendra dentro..y lo pienso probrar.....
un beso!!
entre la historia de Maria Teresa y la tuya Helena me habeis puesto tan blanda que los pelos se me han erizado y una lagrima ha caido .......por dios menuda fortaleza teneis.........para mi soys un gran ejemplo de valentia y coraje ......bravo por vosotras ....
ResponderEliminarAunque me pase tiempo sin pasarme por tu cocina siempre salfo sorprendido por tus grandes y reales historias y por tu manera detransmitor tus sentimientos
ResponderEliminar. Muchas gracias por tu comentario ppr poco que publique siempre estas hay para transmitir animos
Un fuerte abrazo
Aunque me pase tiempo sin pasarme por tu cocina siempre salfo sorprendido por tus grandes y reales historias y por tu manera detransmitor tus sentimientos
ResponderEliminar. Muchas gracias por tu comentario ppr poco que publique siempre estas hay para transmitir animos
Un fuerte abrazo
COMO SIEMPRE UNA PRECIOSA HISTORIA Y UNA MARAVILLOSA RECETA.EL COMENTARIO DE MARI TERE TAMBIEN ME HA HECHO LLORAR
ResponderEliminaruna historia estupenda y un postre de lujo
ResponderEliminarme has emocionado, que bonito¡¡¡¡,
ResponderEliminarun beso
Concha
Este coulant quita todas las penas y imagino la angustia de ese día que gracias a dios no paso nada malo, mil besos y sigue con la sonrisa un besazo.
ResponderEliminarHelena que emotiva eres contando las cosas haces vivir el momento, desde luego que no hariamos por los hijos, respecto al coulant lo hice una vez congelación incluida y me quedo fantastico el caso es que como tengo tantas cosas pendientes no lo he vuelto a repetir.
ResponderEliminara ti desde luego te ha quedado fantastico
¡¡besos¡¡
Helena, esta receta es mi perdición. Hace mucho tiempo que no hago coulants, y me están dando unas ganas de comer uno...Gracias por dejar esta receta. Y oye tienes un hijo muy guapo. Un beso guapísima.
ResponderEliminarQue historia tan emocionante y que dulce tan rico.
ResponderEliminarBesos.
Una receta riquisima!!! pero con lo que mas disfruto es leyendo tus trocitos de vida. Me emocionan !!!
ResponderEliminarQue madre no te entiende mi querida Helena?????. El amor mas grande de este mundo es el de una madre por sus hijos, no hay otro que lo iguale, ni lo supere, y solo cuando eres madre puedes entenderlo, y así pasar a admirar a la tuya propia.
ResponderEliminarEn cuanto a la receta te diré que ayer lo cené, porque yo si los congelo y así tengo para cuando nos apetece. Ayer fue directo del congelador al horno sin darme cuenta y aun así subió igual. Tengo la receta en borradores desde el año pasado, seguro caerá estas fiesta.
Besinos, por cierto tu hijo es muy guapo!!
Siempre con tus historias tan llenas de realidad, y, a la vez, paradójicamente, de positivismo. Yo con un susto así me hubiese derrumbado totalmente, siempre estoy con el miedo de que les pase algo a mis hijos, y pienso que no lo soportaría. Aunque, claro, como niños que son tienen que moverse de aquí a allá y es normal que alguna vez tengan algún percance. Espero solventarlo igual que tú, porque al final el positivismo influye mucho en estas situaciones y las saca adelante satisfactoriamente, no hay más que ver cómo ha crecido el chico, je,je.
ResponderEliminarEn cuanto al coulant, es un postre que no he hecho nunca en casa, y últimamente lo estoy viendo en muchos blogs, yo creo que me voy a animar, y esta versión express puede ser mi inicio. Besos.
Que bonito tu post y tu blog, como me ha gustado!! Me quedo a seguirte!! besos
ResponderEliminarCariño ,me quedo con la frase,la sonrrisa de un hijo nos dá la vida,y es asi.Me has hecho recordar momentos dificiles que tambien he pasado con los mios,como por ejemplo cuando mi hijo el mediano de un mes solo de vida,le dianosticaron meringitis,o mi mi mayor con dos años y medio le operaron de urgencia de una penitonitis,o cuando se tragó monedas y no sabiamos cuantas,el viaje al hospital fué interminable!! en fin cosas que pasan cuando son niños,los padres somos los grandes sufridores,porque a veces en ocasiones no sabemos que hacer en algunos casos,y alguna vez hemos metido la pata,pero menos mal que salimos adelante.Bueno tu postre una ricura,un beso linda que te quierooooooo!!
ResponderEliminarlas fracturas de codo, no suelen quedarse de todo bien. desde luego, estoy totalmente de acuerdo contigo en que las sonrisas, la buena predisposición, el ánimo, las ganas de salir adelante y kilos de abrazos, es lo mejor para sanar. Y lo dice una enfermera. Así que sigue con esa medicina a diario, porque es alquimia pura.
ResponderEliminarel coulant me ha dejado sin palabras... pero tu hijo... anda maja que lo tienes bien escondido... menudo adonis!!!!!
Una bella sonrisa, tanto de pequeño como de mayor. La verdad es que en ocasiones así sacamos fuerzas de donde sea, intentamos arrancar las sonrisas aunque luego a solas nos hartemos de llorar, que también ayuda a rebajar tensiones.
ResponderEliminarSeguro que estos coulants han arrancado más de una sonrisa.
Besos.
Pues yo aun no soy madre Helena pero me ha emocionado mucho leerte, hace unos días hablando con una compañera que lo está pasando muy mal, me decía que ella cada día miraba el lado bueno por su niño, comentaba que no quería estar triste porque su madre se quedo viuda muy joven y ella se crió con una madre depresiva.. cosa que no quería que le ocurriera a su hijo. Ademas que yo siempre digo que lo bueno llama a lo bueno ¿no? así que mejor empezar todo de forma positiva y con una sonrisa.
ResponderEliminarGracias Magda, apoya mucho a tu amiga para que tenga mucha ilusión, seguro que, le va a salir bien, porque su hijo le devolverá la sonrisa y ella se sentirá con fuerzas para seguir, el optimismo llena de energía y fortaleza, si lo practicamos, todos saldremos adelante..y a los problemas aire rápido. Muchas gracias a todos ..y a seguir sonriendo!
Eliminaradoro el chocolate, adoro los coulants... adoro tu receta... algo mas?? esque me muero de habre solo con ver la foto, tiene una pinta increible! además es súper sencillo de hacer! por cierto me quedo por tu blog, he llegado a través de todareceta y me ha encantado
ResponderEliminarbesos
Precioso Helena me has emocionado,tanto tanto que se me agolpan los recuerdos...Te quiero amiga gracias por tu amistad...MUAAAAAAAAAAAAAAAAAA
ResponderEliminarQue buenísimo!! Un postre delciioso
ResponderEliminarHacía días que no pasaba por aquí y para recordar he leído todo lo que me sale en la pantalla..la flechita ya no daba para más. El comentario te lo dejo aquí, sólo para decirte que vaya hijo guapo que tienes y darte la razón una vez más. La sonrisa tiene efecto placebo. Menos mal que lo de tu hijo quedó en "anécdota"..Besos fuertes.
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